Que unos políticos decidan gastarse otros 200.000€ en "trasladar" el recién estrenado carril bici y construir uno nuevos por calles segundarias me parece increíble...
Muestra el valor que se da a la sostenibilidad en Palma y a la salud de su ciudadanos. Y qué además, en tiempos de una crisis económica, se encuentre dinero para derrumbar algo recién estrenado en perfecto funcionamiento para reconstruirlo en otro sitio me parece una estupidez que muestra que ya no queda nada de sentido común en los políticos.
No conozco otro sitio en Europa donde se "deshacen" carriles bicis y calles peatonales para dar más prioridad a los coches... bienvenida a la edad media.